Celiaco por Amor, os preguntareis a que me refiero. Más en esta semana donde el Amor esta por todas partes.
Pero nada tiene que ver con San Valentín. Yo no lo celebro, soy más de Sant Jordi y la coincidencia en esta semana va por otro lado.
A lo que iba, porque hablo yo de Celiaco por Amor. Pues muy sencillo. Es por esa persona con la que has decidido compartir tu vida y no es celiaca. Pero de repente, al igual que tú se convierte. Se vuelve celiaco contigo, pero el Celiaco por Amor.
Ese es el caso de mi pareja, de mi compañero de vida.
El como ya he dicho no es celiaco y tampoco es que se haya pasado a la dieta sin gluten. Porque no es necesario, ni es recomendable.
El simplemente me entiende, me apoya, comparte mi dieta estricta sin gluten y quiere que este tema se normalice para todo nuestro colectivo. Que consigamos ayudas económicas. Lucha con uñas y dientes como el más celiaco de los celiacos.
Parece obvio decir que una pareja se haga cargo de tu enfermedad, la comparta y se implique.
Pero no siempre es así y por eso es de agradecer, de agradecer mucho que mi Celiaco por Amor sea tan entregado.
El Celiaco por Amor, busca sitios donde podamos comer fuera de casa. El último sitio que me busco. Es un restaurante donde pude comer calçots con su salsa y todo.
El Celiaco por Amor, busca como un loco los productos sin gluten en el supermercado. Descubrir los nuevos productos o detectar que marcas remiten al etiquetado. Que no te indicara que son sin gluten con el distintivo sin gluten.
El Celiaco por Amor, es capaz de recorrer Kms andando en busca de ese restaurante del que te han hablado o has encontrado en una web cuando visitas un nuevo país. Sin rechistar o quejarse lo más mínimo.
Además pedirá platos sin gluten, para que podáis compartirlos. Para que los dos disfrutéis de lo mismo y cuando eso no es posible. Te dice que no te has perdido nada, que no está nada bueno el Brownie que se está comiendo con cara de felicidad. Todo para que te sientas bien.
El Celiaco por Amor, siempre, siempre te cuida y cuando hay una celebración familiar o te reúnes con los amigos, es el primero que se encarga de recordar que tú eres celiaca. Para que lo tengan presente. Pero lo más importante para que tengan cuidado en la cocina, así no tener ningún susto y suframos contaminación cruzada.
El Celiaco por Amor, te acompaña a realizar las pruebas pertinentes que tocan cada año. Para hacer los controles y saber que todo sigue bien.
El Celiaco por Amor, está a tu lado cuando por un descuido sufres una contaminación cruzada y te pones malita.
Así podría decir muchas otras cosas que cuida el Celiaco por Amor. Pero creo que os hacéis una idea de a lo que me refiero.
Lo único que quería con este post que hoy le dedico en su día ¡FELICIDADES!. Es verbalizar lo que muchas veces se da por entendido.
Te Quiero y gracias por hacerme la vida sin gluten mucho más fácil. Como me alegro que hayas elegido ser mi Celiaco por Amor.
¿Vosotros también tenéis un Celiaco/a por Amor? contarme vuestra experiencia.
